Once personas fueron procesadas en Boston (Massachusetts, noreste) en la noche del martes por el robo y venta de datos de 40 millones de tarjetas de crédito y débito, obtenidas penetrando los sistemas informáticos de nueve grandes distribuidores estadounidenses, informó el departamento de Justicia (DoJ).
En lo que se considera el mayor caso entablado por el departamento, de violación de la seguridad informática y robo de identidad, los datos robados eran vendidos por internet a otras bandas de delincuentes en Estados Unidos y el este de Europa, siendo usados para retirar decenas de miles de dólares a la vez en cajeros automáticos.
Entre los 11 acusados se incluyen tres estadounidenses, tres ucranianos, dos chinos, un bielorruso, un estonio y otra persona de nacionalidad desconocida, según el DoJ.
(EFE)
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